EXPERIENCIA Y MAGIA

Biribildu es un restaurante temático, donde se fusiona el encanto de la comida griega souvlaki con la magia del circo, creando una experiencia única donde se conjuga la fantasía y el placer de la gastronomía.

Este singular restaurante fue diseñado por el arquitecto griego Minas Mosmidis, quien tiene su sede en la ciudad de Tesalónica en Grecia. El proyecto tiene una extensión de 70m2 y abrió sus puertas en 2013 en Atenas.

Al llegar, dos caballos reciben al visitante mientras que dirigen sutilmente la circulación interna dentro del espacio. Se ubicaron de manera precisa tres cajas de madera paralelamente a la fachada, ocultando las áreas de servicio; esta cajas recuerdan a las cajas de transporte del circo Biribildou, de donde viene el nombre del restaurante.

Biribildu es un restaurante de comida rápida griega donde los gyros son de los platillos más destacados en el menú. El tema del espacio es el circo, por esta razón se colocó un carrusel como el corazón del proyecto, alrededor del cual todo el lugar gira.

El local tiene una vista privilegiada de la costa de Atenas, lo que le imprime una cualidad mágica en armonía con los detalles circenses que se pueden apreciar en cada rincón de Biribildu.

A manera de elementos fantásticos, la caja registradora asemeja a la jaula de un tigre y también arriba de una de las cajas se ubicaron los tradicionales cuchillos del Señor Biribildou.

A la izquierda de la caja, se ubicó una estación de servicio; sobre este elemento, se colgaron piezas de hierro decorativas para atraer a los clientes e invitarlos a disfrutar del menú. Al lado derecho del lugar, se colocaron dos mesas grandes de diferentes alturas donde pequeñas carpas de circo colgadas del techo amenizan la experiencia.

Para consumar la atmósfera, se colocaron posters, dibujos y estampas sobre superficies de madera para decorar el espacio y completar la experiencia. Los baños fueron especialmente pensados para proyectar la idea de ser camerinos de los artistas del circo. Como un detalle sugestivo, se recubrieron los ductos de ventilación del aire acondicionado con un acabado similar al mosaico tradicional mediterráneo, lo cual es muy llamativo y los clientes se pueden relacionar con ese gesto.

La paleta de colores clásica del circo, los colores rojo y amarillo, se presenta como un acabado recurrente sobre metal y madera principalmente. En el exterior, algunos barriles se pintaron de estos colores, que junto algunas sillas, plantas y luminarias, conforman el escenario perfecto para el inicio de una ocasión sin igual.

*Artículo publico en el suplemento ChicHaus 12 de Milenio Monterrey.